viernes, septiembre 01, 2017

The End


Ya llevaba algún tiempo dándole vueltas, varios meses, pero lo he ido posponiendo, porque en el fondo me daba pena. Pero creo que ha llegado el momento de echar el telón. Cada vez me estaba costando más actualizar y cuando lo hacía no todas las entradas tenían interés. La diversidad temática y tonal de este blog (excesiva incluso para la dispersión frecuente cuando nació, hace una década larga, en la época dorada de los blogs) lo condenó desde el principio de su existencia a no ser referente de nada ni a ser demasiado memorable, salvo por algunas entradas concretas que pueden considerarse inspiradas y que, aunque nunca virales, han mantenido un goteo de visitas a lo largo del tiempo. Pero cada vez eran menos los lectores, porque las entradas más interesantes solían ser demasiado largas para el lector casual actual que navega en la pantalla de su móvil. Y al final, la sensación de estar atado a un dinosaurio que no iba a ninguna parte, la falta de tiempo para hacer de manera regular entradas que merecieran la pena, la falta de público y los problemas con las imágenes del blog han acabado convenciéndome de que lo mejor era poner fin a estos trece años de locura.
Así que se acabó. Ha sido una decisión difícil, pero ha llegado el momento de cerrar este blog. No me iré muy lejos, seguiré escribiendo en algún otro blog (de momento tengo mi propia sección en Viñetario), en twitter y, con un poco de suerte, seguiré encontrando editores que me publiquen mis desvaríos.
Gracias por haber pasado por aquí.