lunes, febrero 28, 2005

Fin de semana de premios

Supongo que todos habréis oído ya en las noticias quién ha ganado los Óscar esta noche. Quizá incluso os hayáis enterado de quién fue el triunfador en los Razzies. No pretendo dar noticias que ya todos conocéis, así que me limitaré a un breve resumen.
El sábado, con una gala cutre en un teatro pequeño que hace honor a su espíritu burlón, se concedían los Razzies, los conocidos premios a lo peor del año que se conceden en Hollywood un día antes de los Oscar. Pocos son los premiados que acuden a recoger su premio (Paul Verhoeven fue el primero), pero esta vez Halle Berry hizo gala de su sentido del humor y llenó la entrega de glamour subiendo al escenario a recoger su Razzie a la peor actriz con su Óscar en la mano. Y es que Catwoman fue la gran "triunfadora" de esta edición, junto con el presidente George W. Bush, que obtuvo dos premios por su aparición como él mismo en Fahrenheit 9-11, por la que también fueron premiados, siempre interpretándose a sí mismos, Donald Runsfeld, Condoleeza Rice, Britney Spears y Mi Mascota la Cabra.
Y esta noche se han dado los Óscar. Bueno, supongo que ya todos sabréis que Mar adentro ha ganado el premio a la Mejor Película Extranjera. Del resto, The Aviator ganó más estatuas pero Million Dollar Baby ganó las más importantes.
La ceremonia estuvo plagada de errores: mejor director para el hombre que dirigió El principiante; mejor actor para el pavo de Cómo romper con tu pareja; mejor actriz para la chica de El nuevo Karate Kid; y el Óscar de Nacho Vigalondo lo recogió una tía que había hecho otro corto, no sé por qué. Cosas del directo.
Aun así, la ceremonia tuvo también grandes aciertos: premiar doblemente a Los Increíbles; premiar por fin al guionista Charlie Kaufman; y también premiar la preciosa canción "Al otro lado del río" de Jorge Drexler, que no era lo suficientemente famoso para cantarla en la ceremonia pero, en uno de los momentos más espontáneos de la noche, llevó a cabo su venganza sustituyendo su discurso de agradecimiento por el estribillo de su canción al subir a recoger su estatuilla. Para desesperación (supongo) del realizador de la gala. ¡Genial, mr. Drexler!

No hay comentarios: