lunes, junio 26, 2006

Directo a Video: Salvar el Planeta Tierra (descubriendo una joyita entre las novedades más infames del videoclub)

Con un cartel tan vitalista, es normal que lo vendieran como comedia... pero no lo es
El hallazgo de películas que merece la pena ver compensa de largo la cantidad de basura que me trago tras mis expediciones al videoclub. La de este fin de semana me llamó desde el primer momento. El instinto me decía que era una película que no me iba a decepcionar. Y a base de cinebasura tengo el instinto bastante afinado.
Salvar el Planeta Tierra, que es como han traducido aquí el "salvar el planeta verde" original, padecerá probablemente en su periplo videoclubero español el mismo problema que lastró su carrera comercial en su país de origen, Corea: los distribuidores han decidido venderla erróneamente como comedia, pero, aunque algunos elementos divertidos tiene (especialmente en sus primeros minutos), a medida que avanza la película el tono se va oscureciendo, la sonrisa inicial se hiela y la historia deriva en un dramático y angustioso thriller en el que los giros son constantes y el final feliz se ve cada vez más imposible. Sin embargo, aquellos que no busquen una comedia ligera repleta de gags encontrarán una película muy interesante, intensa y por momentos genial, que no por nada parece haberse convertido en película de culto allí donde ha tenido difusión.
El desequilibrado salvador del planeta, su víctima y su novia funambulista
Salvar el Planeta Tierra comienza cuando un desequilibrado (Ha-kyun Shin, el Ryu de Sympathy for Mr. Vengeance) y su novia, una funambulista borderline, convencidos de que el jefe de una importante corporación es el delegado en la tierra de las fuerzas de Andrómeda que están a punto de atacar el planeta y exterminar a la raza humana, deciden secuestrarle para obligarle a ponerse en contacto con el Príncipe de Andrómeda y hacer que detenga él ataque. A raiz de esto, la policía da comienzo a una investigación concienzuda, dada la importancia del secuestrado (además de un importante industrial, es también yerno del jefe de policía), si bien el responsable de la investigación se quita de encima a un legendario (y muy peculiar) detective en horas bajas, el inspector Choo, en quien el único que cree es el joven (y novato) inspector Kim, y que con sus peculiares métodos iniciará su propia búsqueda.
Lo que durante los primeros minutos puede parecer, por tono y por ritmo, una comedia, pronto se convierte sin embargo en otra cosa a medida que el secuestrado trata repetidamente de escapar y que van saliendo a la luz las causas de la locura del protagonista. La película va saltando entre el thriller, el drama, el suspense, el dolor físico e incluso la acción, todo ello salpicado con algún gag fruto de un sentido extremadamente retorcido del humor, a lo largo de un guión que, pese a sacarse algún conejo de la chistera para que todas las piezas encajen, resulta mucho más redondo de lo que puede parecer en un principio. Y no digo más de la película porque merece la pena verla, y sorprenderse con ella, y no quiero chafar nada.
GENIÓMETRO: 4/5 ed woods

1 comentario:

Lino dijo...

¡Qué maravilla! Voy a comprar todo el cine coreano que encuentre después de haber visto tres joyas como "Memories of murder", "Náufrago en la luna" y ésta.
Un saludo!